Los niños gastan hasta cuatro horas en el celular en su tiempo libre: WhatsApp y Netflix, sus preferidos

Inteligencia artificial, tecnologías cada vez más avanzadas y redes sociales. Los niños alrededor del mundo están creciendo en un contexto donde mantenerse conectado es prácticamente esencial.

“Me divierto en línea y el tiempo pasa rápido. Busco videos graciosos, recetas o lo que están haciendo los famosos”, contó un niño de diez cuando se le preguntó sobre su experiencia en línea.

El 2023 reveló patrones de consumo digital en jóvenes, destacando YouTube y Netflix en videos, mientras TikTok lidera en redes sociales. WhatsApp se coronó en comunicación, especialmente en España.

El último reporte anual de Qustodio ha salido a la luz, arrojando datos cruciales sobre cómo los niños y adolescentes del mundo han navegado por el universo digital durante el último año.

El sitio de internet favorito es YouTube. (Fuente: Qustodio / Infografía: Infobae)

El informe mostró los hábitos de uso en línea de niños de 4 a 18 años, en dispositivos móviles y de escritorio, desde el 1 de enero de 2023 hasta el 31 de diciembre de 2023, comparados con información del mismo período en 2022 y 2021.

YouTube, la aplicación favorita

En 2023, el uso de aplicaciones por parte de los niños mostró tendencias claras en las categorías de video, streaming, comunicación, redes sociales y videojuegos. A nivel global, YouTube dominó entre las plataformas de video, siendo utilizado por el 63% de los niños, seguido por Netflix con un 40%.

En cuanto a las redes sociales, TikTok fue la aplicación más popular, utilizada por el 44% de los niños a nivel mundial, mientras que Facebook y X (anteriormente Twitter) también mostraron una fuerte presencia.

En el ámbito de la comunicación, WhatsApp se mantuvo como la app preferida, con un 37% de uso entre los niños a nivel global, aunque en países como España, el uso ascendió al 67%, destacando la preferencia regional por esta plataforma.

TikTok es la red social más popular entre los niños. (Imagen Ilustrativa Infobae)

Por otro lado, aplicaciones como Snapchat y Discord fueron populares en Australia y Estados Unidos respectivamente.

El interés en los videojuegos mostró una leve disminución, siendo Roblox y Minecraft las opciones más jugadas entre los más jóvenes. Aún así, Roblox encabezó la lista de las aplicaciones más bloqueadas por los padres en varias regiones, lo que refleja preocupaciones sobre el contenido y las interacciones dentro de estos juegos.

Estos patrones reflejan no solo las preferencias digitales de los niños en 2023, sino también la creciente vigilancia de los padres sobre el contenido y las interacciones en línea de sus hijos.

El estudio tuvo en cuenta los hábitos de adolescentes de hasta 18 años. (Imagen ilustrativa Infobae)

Aunque es beneficioso que los niños interactúen con internet y dispositivos electrónicos para su aprendizaje y entretenimiento, resulta fundamental que los padres supervisen y limiten su tiempo de pantalla.

Teniendo que en cuenta hasta cuatro horas gastan los niños en dispositivos tecnológicos fuera de la escuela. Esta medida es crucial para prevenir posibles adicciones y asegurar un desarrollo equilibrado entre las actividades digitales y las físicas, fomentando así hábitos saludables desde temprana edad.

Generación que crece con la IA

“Utilizo ChatGPT y Bing Chat. Siento que me dan buenas respuestas a mis preguntas. Me encanta usar la IA para los deberes escolares porque hace que estudiar y hacer tareas sea mucho más fácil. Lo único que me preocupa en línea es divulgar información personal”, relató una niña de 11 años.

Desde muy pequeños, los menores empiezan a tener interacciones con las pantallas. (Imagen Ilustrativa Infobae)

A nivel mundial, casi el 20% de los niños accedió a OpenAI en 2023, ubicándolo en el puesto 18 entre los sitios web más visitados del año.

Aunque es evidente que solo se está al comienzo de la revolución de la IA, pronto se convertirá en una realidad para las generaciones más jóvenes: la Generación Alfa y aquellos que les sigan.

Es por esto que las generaciones mayores tendrán que aprender y adaptarse con la misma rapidez, para poder guiar a sus hijos y mantenerlos seguros en los nuevos entornos en línea.

A través de los ojos de los padres, es evidente que, así como los dispositivos acompañan a los niños en la mayoría de las etapas de su desarrollo y crecimiento hoy en día, la supervisión y el control parental también son compañeros naturales, dondequiera que los jóvenes estén utilizando tecnología.

Los niños cuentan que ven los chatbots como herramientas de consulta. (Imagen ilustrativa Infobae)

Controles parentales, un as bajo la manga

También se exploró cómo las familias guían la digitalización de los niños, enfrentando juntos los desafíos y oportunidades de la era tecnológica. Cabe agregar que nunca antes se había criado colectivamente a menores que pueden llevar internet consigo, a dondequiera que vayan.

Las herramientas de control para padres se han integrado esencialmente en la vida digital de estas familias como una solución personalizada y fácil de adaptar que permite a todos los miembros familiares regular su uso tecnológico.

De hecho, aproximadamente un 28% de los padres indica que la edad ideal para introducir el uso de controles parentales en los dispositivos de los niños es antes de los 3 años, momento en el cual a muchos niños ya se les ha expuesto a dispositivos digitales como televisores, tabletas y vídeos de YouTube en el teléfono de sus progenitores.

Los controles parentales surgen como una herramienta aliada para los tutores. (Imagen ilustrativa Infobae)

No obstante, la mayoría de las familias optan por implementar controles parentales en la etapa preadolescente: identificando el rango de edad de 7-9 y 10-12 años como el momento óptimo para empezar a aplicar estos controles.

Casi un 25% de los padres considera que entre los 7-9 años es la edad adecuada para iniciar el uso de estos controles, mientras que un 22% piensa que el rango de 10-12 años es el más apropiado, coincidiendo con la media de edad en que los niños reciben su primer teléfono móvil personal.

“A veces pienso que está bien que me supervisen, pero otras veces me enojo porque mis amigos siguen en línea y yo tengo que desconectarme para que mi hermana lo pueda usar”, dijo un menor de 10 años.

Esta parte del reporte se enfocó en una encuesta dirigida a 950 padres y guardianes que utilizan herramientas de control parental y bienestar digital. Al igual que se entrevistaron a 100 adolescentes y preadolescentes para saber cómo sus familias los protegen en línea.